Hace
rato que no hablamos de series aquí en el blog, hoy me dieron ganas de hablar
de una serie, que, aunque muchos piensan es algo más parecido a un gusto
culposo, en lo personal no es así. El día de hoy dedicaré esta entrada a la
serie Glee
.
¿De
qué trata?
Trata
sobre un grupo de muchachos preparatorianos inadaptados que un buen día entran
al grupo coral de su escuela, también conocido como el club Glee, así como del
maestro que los dirige, donde a medida que avanza la historia irán enfrentándose
a retos de presentaciones, al tiempo que van conociéndose a sí mismos.
Trama.
Podría
expandirme y hablar de cada una de las temporadas, en lo particular, podría decir
que Glee tiene tres partes.
Primera
parte:
La
parte del grupo, cuando Will Schuester, maestro de idiomas (español), ve la
oportunidad de dirigir el club Glee, aunque por hacerlo tenga que hacer muchos
sacrificios personales. En la primera etapa trata de reunir a los doce
integrantes que necesita para competir y así asegurar la permanencia de “New
Directions”, como nombra al club. La segunda etapa, es cuando les dan una
oportunidad de continuar, aunque no consiguieron pasar de la competencia
regional. Aun así, enfrentándose a diversos problemas personales y muchos problemas
dentro de la escuela, donde Sue Silvester, la entrenadora de las porristas, le
hace la vida imposible, añadido a al desinterés del Director Figgins, quien
está más preocupado por el dinero que por la educación de sus estudiantes. A
pesar de esto, Will, continúa apoyando a Rachel, Finn y el resto de chicos
impulsándolos a que ensayen para que sean mejores bailarines, cantantes y
mejores personas. Esta etapa termina cuando “New Directions” logra ganar.
Segunda
parte:
Esta
parte se divide en dos: la vida de los graduados, de quienes fueron a la
universidad y de quienes no, así como de los chicos que ya conocemos y siguen
formando parte del club Glee junto a nuevos integrantes. Afuera seguiremos
especialmente a Rachel y a Kurt, pero sabremos de la vida de Santana, Mercedes
y Queen, mientras que Finn permanece cercano a “New Directions” cuando toma
cargo temporal del club.
Tercera
parte:
Para
darle un cierre a las temporadas del club, hacen lo que una buena saga,
regresan al origen, es decir, Rachel vuelve a Lima, para enfrentarse a Sue,
quien ha desecho el club Glee, lo vuelve a instalar y se queda como guía de un
nuevo grupo de muchachos.
Opinión.
Podría
hablar durante horas de esta serie. Hay cosas muy buenas otras no tantas y
otras muy lamentables. Debemos recordar que los programas de televisión se van
grabando a medida que transcurren las temporadas, y en este caso, uno de los
actores principales, Cory Monteith, falleció al término de la temporada cuatro,
lo que trajo problemas a los creadores de la serie, ya que tuvieron que incluir
la muerte de su personaje y alteró los planes iniciales de Ryan Murphy, quien
es el escritor principal de la historia.
Para
mí, lo mejor son las canciones, obviamente, como fan de la música, amaba
escuchar los covers bien realizados por los integrantes del grupo, y de acuerdo
a ello, puedo catalogar los mejores episodios y los que menos me gustaron. Es
interesante saber que los discos alcanzaron ventas inusitadas en muchas partes
del mundo y a partir de ello es que en muchas series y programas comenzaron a
lanzar episodios donde los actores cantaban. Murphy supo tomar el éxito previo
de “High School Musical” que revivió los musicales para adolescentes y explotarlo
al máximo con seis temporadas, que tengo la creencia que, si Cory no hubiera
muerto, habrían extendido al menos otras dos.
La
historia, hay muchas inconsistencias en ella, sin embargo, se nota la pericia
de Ryan Murphy, para escribir añadiendo temas de interés, porque desde un
inicio maneja cuestiones de género que fueron acentuándose conforme va avanzando.
También estoy considerando que Glee está catalogada como una comedia, por esta
razón, de repente nos encontramos con argumentos un tanto absurdos y
situaciones sin mucho sentido. Al mismo tiempo, nos otorga una seria crítica a
la sociedad, hay momentos de mucha reflexión, podemos ver desde el director y
su pésimo actuar ante la educación, maestros que abusan verbal y, a veces,
físicamente, el tema del bullying, el tema de la educación pública en todo su esplendor,
la segregación a aquellos que son diferentes, además de los problemas comunes
de un adolescente, como la popularidad, los amigos, las relaciones
sentimentales y el querer ser alguien.
Mi
parte favorita sería la primera, creo que conocer a los personajes ir viendo su
evolución como grupo, es lo que le da vida a la serie, inicia con las primeras
tres temporadas siguiendo tres años consecutivos de la preparatoria en la vida
de Rachel, Kurt, y Finn, los personajes principales, mientras que la cuarta y
quinta temporada tomarían el último año para despedirnos del resto del grupo
inicial de Glee. Lamentablemente en medio de estas dos temporadas falleció
Cory. Ryan mencionó que él había escrito el final de la serie desde el inicio
de la misma, dijo que terminaría que después de muchos años separados con una
Rachel triunfadora en Broadway, regresaría a Lima, con un Finn que estaría en
el puesto de Will, después de haber estudiado y haberse graduado como maestro y
la frase que el personaje de Rachel dice en el episodio “El mariscal de campo”
de “Estoy en casa”, sería la frase que ella diría en ese capítulo donde los dos
terminarían juntos y casados. La muerte del actor, vino a cambiar la historia,
manejó (inconsistentemente) a una Rachel que renuncia a su máximo sueño en
Broadway, y comete errores tras errores, para regresar a Lima después de haber
fracasado, para reencontrarse con ella misma.
Además
de la pérdida de Cory, creo que la cuarta y quinta temporada, que es lo que yo
considero la segunda parte, son las peores de Glee, perdieron la coherencia de
las historias individuales, agregaron demasiados personajes nuevos, sin despedirse
de los que ya habían terminado la escuela. En un momento te sentías como en un
circo de tres pistas, donde no sabías bien que estaba pasando en cada una de
ellas. Tenemos a los personajes que ya conocemos, haciendo cosas irrazonables,
personajes nuevos que no acaban de encajar, pero a quienes se les dio demasiado
protagonismo y personajes queridos de los que no supimos mucho, por el poco
tiempo que se les dio en pantalla.
En
esta parte, además es cuando comienzan a surgir un montón de absurdos, el
primero, que el personaje más bobo, Brittany se convirtiera de repente en un
genio, la relación de ella y Sam. Tina que pasó de ser una chica fuerte
darketa, pasó a ser una chica amargada sin novio, enamorándose de alguien
abiertamente gay. Una Rachel abandonado su sueño de Broadway, un compromiso de
una pareja que había terminado unos meses antes… y creo que la lista podría
continuar, la falta de consistencia en estas historias y la evolución sin
sentido de los personajes, fue lo que hizo que la gente comenzara a dejar de
ver la serie, algo que había comenzado con un super boom, se fue extinguiendo.
La
tercera parte, me gustó bastante, aunque muchos la consideren la peor parte, me
gusta el ciclo de regresar, me habría gustado ver eso con la actuación que se
pensaba inicialmente de ver a un Finn, con esos problemas, pero al no estar él,
regresaron a una Rachel fracasada (sin mucho sentido), a que se hiciera cargo
de Glee, al final, es entendible, Ryan logró que la historia fluyera a pesar de
que tuvo que cambiar su visión. Defiendo esta parte, a pesar de que muchos
digan que es repetitiva, es algo manejado por diversas sagas, regresar al origen,
para recordar la evolución obtenida al paso de los años. Un lugar familiar,
problemas similares con otra perspectiva.
Lo
que no me gustó en esta parte, fue lo precipitado de los eventos, que en el
episodio final tuvieran que poner, tantos años después, y tantos más. Ese
último capítulo casi parece un caso para la araña. En fin, fuera de esos
detalles y que tal vez pudo haber alargado un poco más esa temporada, de
haberla hecho de 22 capítulos como era lo acostumbrado, para lograr encariñarte
con los personajes y darle cierres a todos los personajes, esos cierres que se
merecían algunos de ellos y no logramos ver en pantalla, a quienes les
dedicaron tres líneas para saber qué había pasado con ellos.
No
obstante, de si la historia siguió el hilo inicial o no, de una muerte
sorpresiva y los aspectos negativos ya expuestos, siempre habrá lo bueno y súper rescatable, como son las excelentes canciones, una
producción musical impecable, por lo que si eres fan de la música y quieres
reír un rato con situaciones en hipérbole y no te disgusta el absurdo, te
gustará Glee y que incluso las temporadas más malas, valen la pena por la
música y la cultura de Broadway que no es tan fácil ver en series de
televisión… al final, la misión principal de la serie era darle un
reconocimiento a las artes y a los maestros que se sacrifican por enseñarlas.